El Papa consagra el mundo al Corazón de María.

Mensaje de conversión

Consagrarnos. 

5-8-88                                                                                                           1480 

Mi amada hija, cada hora que pasa, más necesaria es Mi presencia para los hombres.

Esta Madre, mucho se preocupa por sus hijos. Así fue Mi preocupación cuando Jesús era pequeño.

Era por Mí, cuidado en extremo; no me separaba de El, y no se separaba El, de Mí.

Era amado por José y por Mí, con dulcísimo Amor. Ya siendo grande, mucho tiempo pasaba sin regresar a Mi lado; su techo eran las estrellas, sus rodillas, su almohada. No le importaban las persecuciones, nada le preocupaba, excepto transmitir la promesa del Padre.

El mismo Jesús, recorría caminos, tratando de llegar a los corazones, de convertir almas.

Hoy es la Madre, que desciende del Cielo, para convertir a las almas; hoy es el Corazón de la Madre, El que protege a los hijos; es el Corazón de la Madre, El que Ama y quiere ser amada, junto al Corazón del Hijo.

Bendito sea el Salvador.

Debes darlo a conocer a todos tus hermanos.

(Mensaje de María del Rosario de San Nicolás - Argentina) 

Comentario: 

En este mensaje la Santísima Virgen nos habla de su Corazón Inmaculado, y providencialmenteeste domingo 13de Octubre de 2013 el Papa Francisco consagrará el mundo entero al Inmaculado Corazón de María.

Pero no debemos quedarnos sólo con este acto de consagración universal, sino que cada uno en su casa, en su familia, con sus amistades, debe consagrarse al Corazón de María, pues ese Corazón es el arca de la alianza que Dios ha preparado para aquellos que deben atravesar la gran prueba que ya ha llegado para el mundo, y que con el correr de los días, se hará más dura y difícil.

Por eso tenemos necesidad de una madre. Tenemos necesidad de María, así como Jesús tuvo necesidad de Ella en su vida terrena. Y la Virgen estará cada vez más cerca de nosotros, principalmente en los peligros inminentes en que nos encontremos, pues Ella es la Madre que está en todas partes al mismo tiempo, porque tiene un cuerpo glorioso que se lo permite, y además porque tiene la omnipresencia que Dios le ha concedido.

Aprovechemos este acto de consagración formal que el Papa hará a la Virgen, y no dejemos pasar el tiempo sin esforzarnos por convertirnos más profundamente cada día que pasa, porque el tiempo a nuestra disposición no es mucho, antes de que vengan las grandes pruebas para el mundo.

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